En cada copa de vino reposa un blend del alma de la tierra y del viticultor que la cuida.
La parte más distintiva de una persona, su esencia impregnada en un excelente vino.
Es un municipio eminentemente agrícola, siendo la viticultura el principal cultivo.
Está situado en la orilla derecha del Ebro al lado del río Najerilla. El terreno que ocupa está constituido por terrazas naturales que dificultan, por su orografía, el cultivo de la vid. A cambio imprimen el carácter de sus vinos junto con su terreno y su clima mediterráneo.
Nuestras producciones son bajas y la uva producida es de muy buena calidad. Con esa excelente materia prima y el buen hacer del enólogo, se elaboran nuestros vinos. Todos ellos tienen su propia personalidad y son la mejor elección para cada uno de los momentos que decides recordar, descorchando una botella especial elaborado con amor a la tierra y producido por aquellos que cultivan con sus manos las uvas convertidas en oro líquido.