Una bodega en el corazón del vino
El proyecto del Legado, nace de la inquietud de la familia por revivir parte de la historia de Cenicero.
Una joya enológica en La Rioja
Hasta 1988 los calados, cuya construcción se inició en el siglo XV, eran el lugar donde se elaboraba el vino, participaban todos en su preparación, el pueblo olía a vino, el olor a uva fermentada lo impregnaba todo.
Somos agricultores
Vivimos del cultivo de la vid y amamos la tierra y el territorio. El nuestro es un proyecto de vida, una ilusión, el legado para nuestros hijos para que puedan vivir en nuestro pueblo, Cenicero. Estamos orgullosos de conservar nuestro patrimonio y nuestra forma de vida unida a un medioambiente sostenible, rico y diverso.
Apasionados por el vino
Cuando visites nuestros calados es lo que vas a encontrar, amor y pasión por enseñarte de forma amena y divertida nuestra cultura del vino, la de verdad, la que evolucionó y se convirtió en una de las denominaciones de origen más respetadas del mundo.
Un lugar con encanto
No es casualidad que Cenicero sea el centro del valle del Rioja, que sus bodegas y vinos sean reconocidos en todo el mundo y sus viticultores practiquen técnicas de cultivo que priman la calidad frente a la cantidad.
Esta localidad se encuentra en un entorno privilegiado en cuanto a su clima, su tierra y el buen saber hacer de sus agricultores y por ello es un lugar único en el mundo donde ya en el siglo XV empezaron a construirse calados subterráneos debajo de las casas para proteger su oro líquido.
Constructores, canteros y artesanos diseñaron y construyeron las bodegas subterráneas que son el germen de esta denominación de origen y que nosotros os enseñamos.
Nuestro espacio
El calado de catas, puede visitarse pero también lo alquilamos para eventos reducidos